Diálogo con el Salmo 23
Sé que un día vendrá.
Las verdes praderas,
las fuentes tranquilas,
el tiempo de paz.
Sé que un día vendrá.
La buena suerte
en el trabajo,
la prosperidad.
Sé que un día vendrá,
Y entonces, yo lo sé,
lloraré,
por no haber confiado más.
Pon, como Tú dices
a mis enemigos
como estrado de mis pies.
Hazlo, !pero ponme a mi mismo!
Vénceme de una vez.
Quiebra mis miedos,
Tú sabes cómo hacer
Toma mi desconfianza
Rinde mi falta de Fe
Regálame un buen día
La victoria de saber
que en estos momentos inciertos
Yo lo sabía, y Confié.
David C. 8 de abril
Salmo 23
Por prados de fresca hierba me apacienta.
Hacia las aguas de reposo me conduce,
y conforta mi alma; me guía por senderos de justicia, en gracia de su nombre.
Aunque pase por valle tenebroso, ningún mal temeré, porque tú vas conmigo;
Tú preparas ante mí una mesa frente a mis adversarios;
unges con óleo mi cabeza, rebosante está mi copa.
Sí, dicha y gracia me acompañarán todos los días de mi vida;
mi morada será la casa del a lo largo de los días."
No hay comentarios:
Publicar un comentario